Cuando estamos juntos, cocinamos juntos. Cuando no, compartimos nuestra cocina en el blog. Nuestra cocina es sencilla porque no tenemos pinches; económica, porque no tenemos dinero; de calidad, porque tenemos paladar y segura, porque sólo tenemos una vida para contarlo. Los autores firman cada receta y, al firmarla, juran y adveran haberla cocinado como lo han escrito, haberla comido con satisfacción y responden de que les ha sentado bien. Son los únicos requistos para publicarla.
domingo, 6 de julio de 2014
Gazpacho de cerezas y otras frutas de árbol
Hay que mirar al cielo. Es costumbre adecuada para el estudio de la teología y de la astronomía, ciencias que le resultan algo lejanas al autor, y para el estudio de la meteorología y la gastronomía, que ya le son más próximas. De hecho, mirar al cielo sirve para darse uno cuenta de que los árboles tienen copas, las copas, ramas; y las ramas, frutos que suelen estar muy ricos. Con esa premisa, vamos a preparar un gazpacho con sus cerezas, sus nueces, sus piñones y su manzana para rendir adecuado tributo a la sabia Naturaleza.
Guisamos para cuatro, de modo que tomamos cuatro tomates y un par de cebolletas tiernas.
Tomamos unas cerezas, a razón de un puñadito por comensal, y nos ayudamos de un sacatitos para sacarles el cuesco...
... y tomamos unas nueces del país, descascarilladas y peladas.
Llevamos al vaso de la batidora el tomate, la cebolla, las nueces, un diente mínimo de ajo y las cerezas con un poco de agua, y trituramos a la máxima potencia.
Colamos el triturado porque los ingredientes tienen pellejos, semillas y pielecillas que pueden molestar, y reservamos el colado de los jugos.
Tomamos un trozo de pan seco...
... al que desproveemos de su costra.
Cortamos el pan, así dispuesto, en trozos regulares, y bautizamos con una tacita de agua para que la vaya embebiendo.
Tomamos una manzana verde...
... y un par de cucharadas de vinagre, dos pares de aceite y un par de buenas pulgaradas de sal.
Llevamos el pan humedecido, la manzana pelada y descorazonada, el aceite, el vinagre y la sal al vaso batidor, y trituramos hasta conseguir una emulsión homogénea.
Incorporamos la emulsión de pan, aceite, vinagre, sal y manzana a los jugos colados de tomate, cebolla, ajo y cerezas.
Trabamos con la batidora hasta que se consigue trabar todo de modo homogéneo.
Tomamos unos piñones del país porque no estamos deseosos de aventuras.
Emplatamos el gazpacho con unos piñones a modo de tropezones...
... o lo encopamos, que viene a ser igual.
Que sea de gusto.
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